domingo, 30 de agosto de 2020

TAN LEJOS DE DIOS, Uberto Stabile

TAN LEJOS DE DIOS, Uberto Stabile

Ediciones Baile del sol

Islas Canarias 2010

Gema Estudillo



Cuando vi por primera vez el documental de Uberto Stabile que completa la visión de esta antología de la poesía mexicana en la frontera norte, lo primero que pensé fue : ¡ qué lugar tan poético!. Y pensé que así debía de ser la Comala de Juan Rulfo o la Santa María de Onetti. Un lugar en tierra de nadie, un lugar en el que las coordenadas espacio - temporales son familiares, son reconocibles pero al mismo tiempo están inmersas en su propio proceso de evolución. Un lugar real que podía haberse extraído de la imaginación. Y a medida que avanzaba el documental yo me preguntaba por qué en un lugar así había tanta poesía, se vive tanta poesía y a la vez, buena poesía. Si es que acaso la poesía cumple allí una mayor función social comparada con la poesía en otros lugares. Si el elemento social que conforma la poesía tiene allí mayor peso que el estético. Si es la búsqueda de la belleza lo que les motiva porque ellos no consideran que viven en un lugar bello, a fuerza de querer imitar a otros o de sentirse encandilados por el espejismo yankee.


El profesor argentino Walter Mignolo, uno de los máximos representantes de los estudios descoloniales o poscoloniales en los años noventa, ha trabajado durante años en el análisis de lo que él ha denominado “ el pensamiento fronterizo” o “ la colonialidad del ser”. Estos lugares, en los que expansión colonial les negó la posibilidad de razón, de pensamiento y de proyectar un futuro, son lugares en los que, debido a su historia, a su memoria, al dolor de sus víctimas, a la diversidad de lenguas y al crisol de pueblos, costumbres y saberes que integran, generan lo que se ha denominado “ un paradigma otro”, que no es más que un espacio diferente de los espacios que tienen a ambos lados ( en este caso, México y EEUU ). Se reconocen por las características de aquellos que están a ambos lados en la misma medida en la que también son conscientes de sus diferencias. “ El pensamiento fronterizo “ según Mignolo surge de los desheredados, de dolor y de la fractura de sus historias, de sus biografías y es ese nuevo paradigma, a medio hacer, el que les proporciona una nueva perspectiva en la que reconocerse. Es lo que en definitiva se ha dado en llamar en el caso de la frontera mexicana “ el tercer estado “. Son los bordes de uno y otro los que le otorgan su verdadera idiosincrasia. La necesidad de desviarse, de distinguirse de uno y otro. Y es en este punto se entiende que un lugar así, a medio hacerse, debe de necesitar mucha poesía.


jueves, 20 de agosto de 2020

REFUGIADOS ESPAÑOLES EN ARGELÉS. FOTOGRAFÍA


No puedo dejar de mirar esta foto. "Refugiados españoles en el campo de Argelés se lavan en las frías aguas del mediterráneo. 19 de febrero de 1939. Archivo Agencia Efe" se lee en la leyenda que la acompaña. No puedo dejar de mirar la foto, como dije. La recorro una y otra vez de lado a lado y de arriba a abajo a modo de scanner. Miro cada detalle, la posición de las cabezas, los brazos y las piernas, los gestos, sus ropas, sus desnudeces , el lugar que ocupa cada uno de ellos en la foto, la arena, cada ola... En los últimos meses, el trabajo de traducción del libro " Cuando los árboles hablaban la lengua de las cigarras", de Manuelle Parra Perault, y otro proyecto en ciernes relacionado con el exilio español, me han hecho indagar en la situación de los desplazados por la guerra civil española. De todo el intere-"santísimo" material " incautado" esta foto es una de las que más me ha impactado. En ella vemos hombres, mujeres y niños desprovistos de todo, sin un techo en el que guarecerse. No tienen nada de nada y han sido despojados del más elemental de los derechos: el derecho a la intimidad. El derecho a lavarse, curarse sus heridas, hacer el amor o defecar en privado, lejos de los ojos de todos. El derecho a retirarse atragantados por su propia dignidad sin ser observados en lamentable trance. Cuentan que cavaban en la tierra y se tapaban con la arena para poder protegerse del frío de la noche o de las cuchillas afiladas del viento helado de febrero. Los cabellos anudados por la sal, el sol y el viento. Las quemaduras solares. La piel cuarteada y reseca. El corazón, piel de zapa curtido por el horror. Muchos de ellos enloquecieron, otros se suicidaron, otros lograron zarpar hacia un destino mejor. ¿ Qué habrá sido de todos ellos? De estos, los de la foto. La madre disimula, mira hacia otro lado y viste a su hija entre el grupo de hombres desnudos ¿intentando preservar su inocencia?. ¿ O acaso es el policía el que no aparta la vista de ellas para asegurarse de que no caigan en la tentación de mirar a los hombres y desacaten las normas de orden público, el pudor y el recato? No sé. La mujer y la niña no miran al mar, no miran a los hombres. El policía las mira a ellas como custodiándolas y los hombres se asean o se secan, aunque parecen controlar la escena del trío en modo "ojo avizor", probablemente, por si el policía se pasa. Tiene tantas lecturas. Hay tanta poesía en ella. El hombre desnudo frente al mar en 1939 o ayer. ¡Qué más da! Argelés, Lampedusa, Tarifa... El hombre, siempre desposeído, de cuna o tumba, frente al mar.